23.9.12

Cirugía y estrés

Siempre he sido de la opinión de que el estrés es un factor muy importante en el tratamiento y prevención del cáncer. Los dramáticos cambios bioquímicos que la ansiedad produce en las personas empeoran notablemente las perspectivas.

La cirugía produce estrés en el paciente, por tanto es lógico inferir que cuanto menos invasiva sea mejores serán los resultados y el pronóstico. Y, ciertamente, hay muchas evidencias científicas de que cuanto menos invasiva (y, por tanto, menos traumática) sea la cirugía, el riesgo de metástasis es menor.

La cirugía laparoscópica es un tipo de cirugía mínimamente invasiva que precisa tan solo de pequeñas incisiones, a diferencia de la cirugía abierta. Un estudio publicado en Lancet (The Lancet Oncology, 10, 1, Pags. 44 - 52, enero 2009) comparó la laparoscopia y la cirugía abierta en la realización de colectomías en pacientes con cáncer de colon. Los pacientes operados mediante laparoscopia mostraron un 61% menos de recurrencias con un 62% menos de fallecimientos por el propio cáncer de colon. Un seguimiento a largo plazo de estos pacientes (una media de 95 meses) ofreció un resultado 56% menos de riesgo de muerte por cáncer de colon en los pacientes operados mediante laparoscopia frente a los de cirugía abierta. La tasa de supervivencia a los 5 años fue algo mayor con la laparoscopia.

La cirugía mínimamente invasiva produce significativas mejoras en la supervivencia de pacientes con cáncer de pulmon. La toracoscopia videoasistida (TVA) que es mínimamente invasiva fue comparada con la tradicional cirugía abierta para realizar lobectomías. La supervivencia a 5 años fue del 97% en los pacientes operados mediante TVA frente al 79% en los que fueron operados mediante cirugía abierta.

La cirugía mínimamente invasiva en el cáncer de pulmón realiza incisiones más pequeñas por lo que el dolor postoperatorio es también menor, se pierde menos sangre, se preserva mejor la función pulmonar y el paciente retorna antes a su actividad cotidiana.

Esto es tan solo un dato más que debe hacernos reflexionar sobre los métodos quirúrgicos a utilizar cuando sea posible. Por otra parte, aporta un elemento más en relación a la posible importancia del estado de ánimo del paciente en relación al pronóstico y la supervivencia.

A partir de aquí debemos tomarnos seriamente la cuestión de facilitar el mayor grado de bienestar tanto por parte del personal médico como del propio paciente.

Recordemos que el cerebro humano puede ser capaz de favorecer tanto como obstaculizar el progreso hacia la recuperación de la salud.

Tal vez resulte interesante:

- Psicología y espiritualidad del cáncer.
- El terreno del cáncer.
- ¿Funciona realmente el pensamiento positivo?
- Claves para comunicarse con el cuerpo.